sábado, 31 de marzo de 2007

Soy bastante mala para recordar nombres, no así las caras. Las recuerdo bien, se cuando conozco a alguien aunque no siempre recuerdo de donde. En realidad es difícil cuando se ha vivido en cinco ciudades diferentes y se han recorrido varios círculos sociales y que decir de los colegios.
Aún así, se cuando conozco a alguien y por eso me causa mucha gracia cuando alguien no me reconoce o no sabe de donde me conoce.
Me pasó hoy. En la zapatería, entre con mis niños y mi marido en busca de tenis para ellos, y me tope con mi antiguo nutriólogo. Me miró, le sonreí, de lejos, y vi que puso cara de ¿quien es?.
Debo admitir que no acudí a muchas consultas con él, ya que soy necia con eso de las dietas, pero a las que asistí le di mucho trabajo: intolerante a la lactosa, esquiva de la carne, amante de los dulces... en fin, un caso extraño. Además iba recomendada de mi tía que lleva años siendo su paciente.
Pues no, no supo quien era. Devolvió el saludo con cara de "ya ligue", y salió de la tienda.
Yo aún tengo la receta pegada en el refri, con todas las estrictas recomendaciones y una nota al final: Cualquier duda por favor llame a su amigo el Dr. Fulano de Tal.

viernes, 30 de marzo de 2007

Mi amor en nuesta amistad

Inefable.
Así amaneció. Abrió los ojos al nuevo día y las pupilas le dolieron como si alfileres le perforaran los ojos. -Cierra la cortina por favor- dijo. Se giró sobre si misma y acomodó su vientre sobre una almohada. Intentó mirar de nuevo, poco a poco, asustada.
Esa mañana como muchas otras de su embarazo, sintió nauseas, pero comenzó la relajación y bebió agua mineral.
Afuera el terreno colindaba con los sembradios. -malditas cebollas- pensó. Se incorporó lentamente y alcanzó su bata.
Abajo la casa no se detenía, ruido en la cocina, el extractor de jugos y el microondas, Chayito hacía el desayuno para el niño.
Cuando su marido salió del baño le regaló una sonrisa. -good morning, ¿cómo amanecieron?...-
Ella solo devolvió la sonrisa, a esas horas no recordaba como articular palabra. Esperó a quedarse sola en la habitación, se lavó la cara, y buscó entre sus cosas.
Con cuidado subió en el taburete, se alzo de puntas, alcanzó la caja. Buscó dentro y al poco encontró el cuaderno. Primero lo sacudió un poco, lo acarició. Luego lentamente pasó las hojas una a una, sintiendo en cada hojeada un brinco del corazón.
Se detuvo en una página. El papel azul con la imagen de un chelo seguía pegado con una cinta amarillenta.
Leyó conteniendo una lágrima:
"Tu recuerdo en las cuatro cuerdas, en mi, en ago, sep, oct, nov.
En Tu corazón habré sentido, lo que ahora sueño despierto.
De tu encantó silencioso aprendí. Vivo tu música en mi profundidad marina,
en mis versos azulosos, formo las ondas marinas,
que se dibujan por siempre en tu sonrisa.
Te doy todo lo que tengo, mi amor, en nuestra amistad intacta, por siempre."
Cerró los ojos de nuevo, dejó el cuaderno abierto sobre la cama. Ahí se leía la fecha,
Noviembre 1989.

jueves, 29 de marzo de 2007

Un instrumento de tu paz.

A veces cuando hacemos algo no tenemos en cuenta el efecto de nuestros actos, sobre todo cuando lo que hacemos no es para nuestro beneficio.
El otro día saque un bonche de libros; unos ya leídos otros no, de la universidad, de años atrás, etc.. pensé en regalarlos, en llevarlos a un depósito o algo así.
Ese noche recibí algunas amigas en la casa y aproveche. Los libros estaban ahí en la escalera, muy a la mano y sin pensarlo les dije -tomen el que gusten-
No todas lo hicieron , solo algunas, que raro, te regalan libros y no te inmutas,pero en fin. Las que vieron dijeron encontrar cosas interesantes y hasta se sorprendieron de mi desapego por esos libros. -Ya me nutrieron, ahora que fluyan- dije.
Pasaron los días y de pronto el esposo de una de esa amigas me dijo -muchas gracias-
Me sorprendió, -¿de qué?- conteste.
-Por el libro, me ha servido mucho, es justo lo que necesitaba. Tenía días buscando , pidiéndole a Dios una señal, un mensaje, y este libro..es justo lo que necesitaba. Así exactamente, es lo que buscaba.- dijo.
Pensando luego en eso, me acorde de aquella película "Cadena de favores" se llama, que plantea la posibilidad de generar una onda expansiva de actos generosos, que den bienestar a los demás.
Muy profunda y emotiva película. Y pensé también en la oración de San Francisco de Asis, "Hazme un instrumento de tu paz..."
Entendí que nuestros actos provocan cosas y cada vez alguien se ve afectado. Por eso si algo he de pedir que sea eso, así solo eso, "hazme un instrumento de tu paz".
“Insistir, persistir, perseverar, es una vocación de hombre bueno, que eso también quiere decir ciudadano y buen escritor. Dos metas muy lejanas y muy difíciles de cumplir. Pero un hombre se mide más por lo que sueña que por lo que realiza. Más vale soñar que realizar los sueños”.
Andrés Henestrosa

Vivir para escribir

"El amor es la locura más lúcida que tiene el hombre"...
Cuando escuche esto, de inmediato me volví a ver de que se trataba. Mire la pantalla, era un viejo.
Sentado recibía las preguntas escritas del periodista, ya que no oía bien. Una a una sus respuestas me fueron cautivando. Su simpleza y sencillez llenas de sabiduría eran inocultables.
Escritor de profesión, de origen oaxaqueño, "a dado las aportaciones mas destacadas al indigenismo" dijeron. Cien años de edad que no representa.
Andrés Henestrosa se llama y en mi infinita ignorancia nunca había oído hablar de él.
Basto ese corto reportaje para que me fascinara. Su forma de ver la vida, su voz alegre y gritona.
Señaló la infancia como "el único paraíso" -ahí todo es azul- dijo. La vejez como la espera y aunque lo único que lo inquieta es la muerte, de ella dijo: "yo no le temo a la muerte aunque la encuentre en la calle. La muerte no lleva a nadie si Dios no le da licencia".
Lo que más me impactó fue cuando reveló el secreto, su secreto, aunque él no lo presentó así. El periodista preguntó -¿cuándo escribe maestro?- a lo que Andrés contestó - siempre, todos los días- Me quedé atónita, repitiendo esas palabras en mi mente. "Todos los días"...y tiene 100 años. ¡Qué maravilla!, el secreto de la longevidad había sido revelado.
Este hombre de juventud acumulada, ha desafiado a la naturaleza mediante sus letras. A mantenido su mente sana a base de darse a los demás, de dejar plasmadas sus ideas, a mano, en papeles orgullosos de ser llenados.
Me sentí feliz de ver a ese hombre, de conocer su secreto.
Me vestí y encendí la computadora.

miércoles, 28 de marzo de 2007

Mi Principito

-Mami, ¿los lobos te persiguen si corres?...
-Si tienen hambre, si.
-¿comen carne humana?...
-Si tienen hambre...si.
-Y..si no tienen hambre, ¿te persiguen?...
-Yo creo que no.
-Si mami, si te persiguen, ¿sabes por qué?...
-¿Por qué?...
-Por que buscan un amo.
Todos somos lobos alguna vez.
Depredadores feroces, hambrientos corazones esteparios.
Deseosos de ser domesticados, amansados, cuidados.
El corazón es muy solo. Necesita otro corazón para sentirse vivo,
por eso busca, caza, persigue.
Hasta que encuentra su alimento.
El hogar abierto de otro corazón. La sangre palpitante que se bebe.
Somos lobos, calculadores, deseosos de ser amados.
Es el amor nuestro alimento y emprendemos una carrera hasta tenerlo.
Hasta poseerlo.
Entonces, satisfechos, no nos vamos más de ese corazón.
Descansamos la cabeza, cerramos las fauces.
Dormimos con la mano del amo sobre nuestro lomo.
A mi "Principito". Mi maestro índigo. Mi Eugenio.

martes, 27 de marzo de 2007

Mente en positivo

Una vez cuando estudiaba e el DF, iba ya tarde para la clase de 9 de la mañana, así que cuando por fin encontré estacionamiento, me apee del coche y salí corriendo hacia el salón. Tenía que atravesar el patio, pasar un corredor, subir tres escaleras. Mientras luchaba con el morral, la bolsa, los malditos zapatos que escogí ese día etc, pensaba en mi misma y en que me podría caer en las escaleras. Acto seguido subo una escalera y en la segunda, ante la mirada risueña de un grupo de chavos, me caigo. Sobra decir el "oso", y el esfuerzo por levantarme rápido y recuperar mis cosas para salir huyendo de ahí.
En otra ocasión, años después, en un hotel de lujo a donde acudimos a celebrar el cumpleaños de una amiga, un señor desconocido me abordo cuando me dirigía al baño. Sin más ni más, me entregó una rosa, y me dijo - disculpe mi atrevimiento, no pretendo importunarla, pero es ud, la mujer más hermosa que yo haya visto jamas- ¡Bueno! me hizo el día y hasta el mes.
Luego recordé que esa mañana al arreglarme me visualice como una mujer atractiva, no por presunción, sino porque quería sentirme bonita en un día particularmente gris.
Todo esto viene a colación por que hace poco una persona me hablo sobre la ley de la atracción, según la cual atraemos hacia nosotros lo que pensamos. Así que solo hace falta pensar las cosas adecuadas.
Soy escéptica al respecto, pero recordando algunas cosas creo que tal vez no sea tan descabellada la teoría. Ahora bien, el meollo estaría en tener pensamientos buenos siempre, cosa que es de entrada poco probable dadas las condiciones de stress que vivimos hoy día.
Aún así vale la pena intentarlo, podríamos empezar por cosas tan bobas como mi deseo de sentirme bonita y de ahí partir hacia nuevos horizontes de bienestar. Así nos veríamos disfrutando la vida sin enfermedades, compartiendo lo que tenemos con los demás, recibiendo amor de todos los seres humanos, salvando al planeta, descubriendo nuevos mundos, superando las guerras... ¿qué? ¿parece utópico? Bueno así creía yo y recibí una rosa.

viernes, 23 de marzo de 2007

Penélope

Esa canción cursi de Serrat se me vino hoy a la mente.
La mujer que se queda esperando a su amado toda una vida, sentada en la estación del tren, Bonita, conservando su imagen igual para él.
La tachan de loca y luego, cuando él regresa, no lo reconoce. No es lo que ella recordaba.
Ingenua Penélope, ¿que no se le ocurrió que la vida cambia a las personas? Incluso cuando creemos conocerlas, al paso de los años ya no son lo mismo.
El asunto es que a veces es mejor quedarse con el recuerdo. Sobre todo si ese recuerdo es bonito.
Si es algo que te llena y te hace tener momentos agradables al pensarlo. Por que a veces al reencontrar a las personas tenemos esa idea de como eran, o como creíamos que eran y de pronto se rompen los recuerdos.
Ese tesoro tan bien guardado, se pierde.
¿Y cuando es uno mismo el que cambio?....¡Bueno!

Bailando sin salir de casa

La terapia del baile le llaman. Otra de tantas terapias que existen hoy en día.
Consiste en sacar bailando las penas. No importa el ritmo o la soltura al bailar, ni siquiera importa si se sabe bailar o no. Con mover el esqueleto basta.
El ser humano lo ha hecho desde siempre. Es una forma de comunicación.
Menear los pies, levantar los brazos, agitar la cabeza, dar de brincos, girar las manos, mover la panza...todo se vale.
Solo necesitas música de cualquier tipo y desinhibirte.
Así a punta de espasmos se va liberando el alma. Como un exorcismo rítmico, se suda el stress, se sacude la mente de viejos temores. Y lo mejor, no hay que ir a ningún lado a tomar esta terapia, no cuesta, no se necesita instructor o terapeuta.
Uno es su propio maestro.
A son de cumbia, salsa, rock and roll o reggetón, acaba con la depresión.
Particularmente, prefiero los éxitos de los ochentas, soy fetichista.
Enciendo la tv, busco videos, subo el volumen y a bailar se ha dicho!
Poco a poco libero endorfinas, elevo mi ritmo cardiaco, me quiero de nuevo.
Hoy bailo por convicción. Bailo para sentirme bien.
Hoy bailo para mi, conmigo.

jueves, 22 de marzo de 2007

Y ahora voy a llorar.
Buscando respuestas en las letras. En otras letras.
Solo consigo confundirme más.
Decidí poner el corazón en esto. Me lance sin titubeos.
Y aquí estoy, a punto de llorar.
¿que es lo que quieres?
Ni siquiera puedo decir que es esto que siento.
Solo lo siento. Como antes.
Como duele.

Entre artistas te veas

¡Ah, los artistas! Todos son iguales.
Despreocupados seres atemporales divagando por la vida.
La cita era a las once, con el muchacho de los grabados de arena. Once treinta, no aparece.
Llamada al celular, me confirma que ya viene. Tenía presente el día no así la hora.
¡Vaya!
Aparece con su atuendo incomprendido, camisa de franela en plena primavera, sombrero de ala ancha, morral y huaraches. Se disculpa, pide un café, saca una libreta. Me muestra su obra.
De inmediato me transporto a aquellos días cuando acompañaba a mi amigo el pintor a montar sus primeras exposiciones.
Su taller era una mezcla de pinturas, material reciclado, fotos, brochas, telas, cuadros, la comida de ayer y el boceto de mañana.
Trabajaba de noche. Se inspiraba en el día.
Me pedía que escribiera para su obra. Yo me quedaba mirando, tratando de entrar en ese mundo abstracto que él traía, imaginando que sería todo aquella amalgama de materiales y formas.
Al final quedábamos a mano.
Hoy tengo un cuadro suyo en mi casa. Es motivo de platicas, polémicas y preguntas.
Ya no veo más a este amigo. Se que es un pintor reconocido y que se mueve en el mundo del arte. Sigo mirando su obra. Sigo sin entender.
Su cuadro en rojos y blancos ilumina la estancia. Con esa luz diferente que tienen las cosas extravagantes.

miércoles, 21 de marzo de 2007

Feeling Blue

Hoy amanecí con antojo de chocolate. Mi antidepresivo favorito.
Una vez por mes, mas o menos, recurro a el para sacarme la nubecilla azul que me cubre el corazón. Cuestión hormonal tal vez.
Lo cierto es que me funciona. Como si al beber esa melcocha obscura o saborear un trozo de ese manjar, se pusiera en marcha mi motor de emociones.
Sofi, mi amiga del alma, decía que no hay sensación más placentera que la del empalagamiento. Sentir adormecida la garganta, la lengua aletargada y un deseo sublime por que eso no acabe. Embriagarse de dulzura hasta que no se puede más. Que razón tenía.
Y lejos de hacer una oda al chocolate lo que me propongo hoy es descubrir ¿por qué amanecí así?¿qué motivo oculto me provoca estar con la guardia baja? ¿cómo es que me soporto con estos cambios de humor? ¿cómo es que me soportan los demás???..

Ya. Bebo mi taza caliente, me arremolino en el sillón y dejo que poco a poco me haga efecto esta poción. ¡Ah bendito chocolate!

martes, 20 de marzo de 2007

A su antojo...

Busco en el closet una blusa blanca, por aquello de la energía que pudiera recibir hoy. Lástima que el tiempo no me lo permite, me iría gustosa a trepar a las ruinas de Tzintzuntzan. Allá bien arriba alzaría los brazos al cielo, cerraría los ojos y con un grito de las entrañas sucumbiría ante la primavera.
A fuerza de sentirme renovada hago un poco de ayuno.
¿Por qué será que pongo tantas expectativas en ésta estación? Cambio el guardaropa, las colchas y hasta los mantelitos individuales, con el motivo único de sentir este nuevo aire.
A nivel personal me gusta que amanezca mas temprano, me da mas tiempo de reflexión.
El sol con su nuevo tono me cosquillea. Me doy el lujo de ser CURSI, con mayúsculas, al fin y al cabo "love is in the air".
Compraré unas flores para la casa, cocinaré pasta y seguro, seguro, usaré otro color de lipstick.
Llegó la primavera, que sea según ella quiera.

lunes, 19 de marzo de 2007

No quiero marearme, por eso dejo el libro y clavo la mirada en el paisaje. Antes cuando viajaba en coche podía leer sin dificultad, ahora no. Cosas de la edad tal vez o quizá solo predisposición de la mente. No lo lamento. El camino es hermoso. Mas de 30 años viajando por aquí y aún me parece hermoso. Ahora más que antes. Han creado nuevas vías hacia el mismo lugar, modernizaciones de la autopista que nos permiten disfrutar de lago de Cuitzeo en su esplendor.
Allá a lo lejos se ve el pueblecito por donde pasé muchas veces, convertido ahora en "pueblo mágico" para que no se hunda en el olvido. La carretera cruza el lago de orilla a orilla, invadiendo el hábitat natural de varias especies de aves. Pienso en el daño que esto ocasiona, pero la belleza es tanta que mejor me quedo absorta en la fauna del lugar.
Que paz. La velocidad del auto no se siente, solo el pasar de los juncos y a lo lejos las aves.
El sol se pone, y parvadas enteras regresan al hogar. Igual que yo.

viernes, 16 de marzo de 2007

Ciber Amor

Ella miró la pantalla de nuevo. La imagen seguía ahí, nítida. Tan cerca, tan cerca, que casi podía tocarlo. Sentir su respiración, su olor. ¿Tuscany? ¿aún?..
Esa sensación cálida la invadió, una opresión en el pecho.
El corazón late más aprisa y vuelve a ver la pantalla.
El se mueve, sonríe.
Ella se toca el pelo, cierra los ojos y recuerda...
Son las 8:00 a.m. y ahí están. Sentados frente a la caja de pándora, mirándola. Regalándole su más profundo sentimiento a una web cam. Suspirando, tecleando. Pensando que, sin importar la distancia, el otro está ahí. A solo unos clicks de sentir.

Tertulias

La flauta dulce es un instrumento menospreciado. Eso me dijo el maestro de mi hijo, la tarde que le avisé que el niño cambiaría de instrumento. -Dos años en el taller y aún no lo veo entusiasmado con la idea- le dije.
Ahora mi hijo aprende guitarra. Tradición familiar, tal vez.
Y es justo ahora cuando las notas suaves de la flauta dulce llenan mi casa. Una vez por mes se reunen aquí "los músicos". Venidos de diferentes bandas, distintos géneros musicales los formaron. Huérfanos todos de su natal afición han retomado en su madurez ese gusto por el "palomazo". No importan las notas, pues tocan sin partitura, solo importa el sentimiento y ese deseo implacable de hacer música.
Melodías barrocas adaptadas al bajo eléctrico se encaminan hacia un danzón dulzón mientras las guitarras se ponen de acuerdo.
Noche bohemia sin duda. El pretexto ideal para romper la semana y hacer de la plática cotidiana una cátedra de filosofía.
Filósofos, músicos de corazón. Distintas profesiones. Espíritus libres por convicción.

martes, 13 de marzo de 2007

Música para mis oídos.


Mi abuela conoció a mi abuelo siendo una niña. Ella tenía 15, él 27.
Ella ingenua y pueblerina. El reconocido músico, culto.
Y se enamoró a primera vista. Con ese amor inocente que solo el tiempo logra transformar.
El tiempo que estuvieron casados, 16 años, solo fue el preámbulo de ese amor inmortal.
Mi abuelo murió hace 50 años y es como si siguiera vivo a través de mi abuela.
Kitty, como le decimos de cariño, consagró el corazón a su amado. Desde el día que le conoció hasta el día de hoy. Solo un amor más grande ha inundado su vida, el amor a Dios.
Ahora leyendo sus memorias me topo con esa imagen de ella el día que Miguel partió al cielo, arrodillada junto a él. Leo sus palabras: "Amado mío, ya conoces a Dios a quien tanto amas. Ayúdame. Y su presencia espiritual me invadía y ya no estaba en su cuerpo, estaba en mí y me alcanzaba la fuerza para alabar a Dios, adorando su voluntad."(1)
Entonces comprendo que es a través de Dios que se han amado todos estos años. Dios fue el centro de su relación mientras vivieron juntos, y es Dios quien ha permitido que ese amor traspase la barrera de la muerte.
Hoy mi abuela camina con dificultad, sus mas de 80 años han cansado su cuerpo. No así su alma.
Ella tiene "juventud acumulada". Su mirada azul, dulce, profundísima, transmite un paz que en ninguna otra mirada he visto. Y aún sigue amando a Miguel, con el mismo amor sublime. Con la misma entrega absoluta. Con la fuerza eterna del amor espiritual.

1."Media vuelta al Corazón. Diario de una mujer." Ma. Cristina Macouzet de Bernal Jiménez

lunes, 12 de marzo de 2007

De plantas, letras y abono.

Hoy se alinearon los astros, se cuadró mi signo astral o algo sobrenatural pasó. Hoy reencontré a mi antiguo jardinero. Se había desaparecido del mapa por mucho tiempo, dejándome sola y abandonada, lamentando haberle dicho sus verdades la última vez que podo mis ficus.
Varios otros pasaron por aquí, sin pena ni gloria. Dejándome mas triste al ver mis helechos amarillos y la garra de león trasquilada.
¿Quién como él? - me decía a mi misma- que me entendía tan bien. Solo él interpretaba mis emociones. Si una semana andaba yo "apachurrada" me plantaba belenes coloridos mas allá de donde yo imaginara para que fuera sorpresa; si otro día me veía eufórica entonces me daba paz con un caminito de margaritas y la enredadera bien podada. Cada semana me escuchaba,paciente, decirle como me gusta el jardín, como es importante abonar la tierra y como el agua ni mucha ni poca. Sabiendo de sobra que el maestro es él.
Mi jardín resintió su ausencia, pero creo que mi espíritu lo resintió mas. En esa relación que tuvimos hace años, que duró tan poco (apenas 5 meses) se convirtió en mi alma gemela. Fue mi maestro en esto de la "jardinería", despertó mi amor por plantar mis emociones y cultivar mis sensaciones. Me enseño todo lo que se puede lograr con un pedazo de tierra fertil, como una hoja en blanco para ser llenada con palabras... "Al plantar -me decía- "todo es amor, toda creación es un acto de amor, un amor inmenso"- Así entendí que al abonar estamos ayudando a germinar amor, vida. Cada siembra es un arte que damos a los demás.
Mi jardinero esta de vuelta. Cierto es que yo le busque hasta encontrarlo. Ahora cuando nos vemos me echa en cara el que siga yo haciendo el jardín como si jugara; que quiera plantar cada hierba con una metáfora -no aprendió nada Sra. Rodríguez, ¿que hace para cultivarse?-
Yo le sigo diciendo como me gusta el jardín, que si la tierra debe estar abonada, que si agua ni mucha ni poca. El sigue siendo el maestro.
Mi amiga, la chula, cumplió 40 años. Hemos venido celebrando este evento todo el fin de semana; y es que no es para menos, si algo es digno de celebrar es que existan personas como ella.
Con su sonrisa grande y su acento norteño siempre esta dispuesta a ser receptora de confidencias. Su casa y su alma están abiertas a todos, con los aromas de su cocina, llena de comida rica que ella no come por aquello del bypass, pero que prepara con alegría para deleitarnos.
La chula tiene un don de platica. Su vocabulario así como sus gestos son enormes; fácilmente atrapa a su interlocutor con un relato de familia. Sus frases se han hecho celebres entre nosotros y quizá la que mas me gusta es esa de "cada quien con su equivocación", que saca a relucir cuando se refiere a su marido "el chulo".

Generosa y cariñosa, es amiga de todos. Es por eso que su fiesta estuvo tan concurrida y es por eso que al verla soplar sus 40 velitas, reflexiono: Cuando la vida se vive así, feliz, relajada y amando a los demás, no cabe duda que ¡la vida es chula!.

jueves, 8 de marzo de 2007

Mi tía tuvo un accidente. Fue así repentino, como todos los accidentes.
Ocurrió cuando fue a conocer una casa de alquiler para mudarse.
Era de noche y la propiedad no tenía suficiente luz.
Recorriendo las habitaciones, mi tía entró en una, en el segundo piso, que le pareció particularmente agradable. Tenía muy buen tamaño, piso laminado, y una hermosa puerta que daba a una terraza.
Mi tía se acercó a la puerta y miró, con la poca iluminación que había, a través del cristal. Afuera la luz de la luna parecía reflejarse. Tomó el picaporte, lo giró despacio con la mirada fija en el exterior, abrió la puerta, dió un paso y cayó al vacío.
No era una terraza, no era una puerta, tan solo una ventana. Una grande y bella ventana.
El golpe fue terrible. Fracturas expuestas de brazo y mano, la cara destrozada.
Operaciones, rehabilitaciones, terapias, meses de convalecencia siguieron a ese día.

¿Qué fue lo que pasó? -le preguntó- ¿cómo es que no viste que era una ventana?.
No lo se. - me responde con la mirada pérdida y una leve sonrisa - Solo recuerdo que la vista era maravillosa.

miércoles, 7 de marzo de 2007

Eterna juventud

Tengo estos vecinos, tiernos, que veo a diario caminar.
Él, bastón en mano, apurando el paso para alcanzarla a ella, que avanza con prisa, siempre con la frente en alto. Son dos ancianos.
Se ve que les gusta caminar, muy temprano para mi, casi al amanecer. Lo que me hace pensar que despiertan de noche. Tal vez se miran en la cama y aunque no reconocen el cuero, identifican la mirada. Si, son ellos, después de tantos años, juntos, ahí encontrándose al abrir el día.
Ella viste su delantal azul, el pelo recogido en una trenza blanca. Él, pantalón vaquero y camisa a cuadros, se ajusta el sombrero.
Ella recoge flores, hierbas, saluda a los otros vecinos, camina. El se detiene y respira. Al poco la alcanza.
Otras veces los veo por la tarde, sentados frente a su casa, mirando pasar la gente. Cada auto levantan la mirada, luego regresan a lo suyo, ella borda, él mueve la tierra con una vara.
Así una vida juntos, años y años haciéndose compañía. Uno sostiene al otro. Sus años se unen cada día que pasa.

martes, 6 de marzo de 2007

"No lamentes las despedidas. Son necesarias para volver a encontrarse. Y reencontrarse depués de un tiempo o después de toda una vida es para los amigos."
Richard Bach.

sábado, 3 de marzo de 2007

El encanto de mi vida simple

Me despierto y te siento, tu mano tibia alrededor mío.
Apagas el despertador y cierrro los ojos de nuevo, cinco minutos más de ternura.
maxmornig 91 dat, ahora si, me estiro.
Café, loncheras, bloqueador. Tres besos rápidos y uno lento. Recen por favor!
Soledad.
Luz solar, abro ventanas. Agua a las plantas, mas café.
La regadera me recuerda mi infancia, la prepa, bien caliente o no me baño!
El espejo ¿donde has andado?...
jeans, aretes, perfume.
Las llaves y voy en automático. Todo el paisaje se pinta de lila, es marzo en mi ciudad.
Oigo la radio, hablo sola, me muerdo los labios..esa maña.
Un día entero, media toronja, un cuarto de queso. ay! intolerancia a la lactosa.
Tarde tareas, mails y telefonazos. Una lista para el súper . Me quito los zapatos.
El trajin de la hora cero, busco un rato par mi.
Se refresca el ambiente...y me siento en la cama
Estiras la mano, -ven- acomodo mi almohada.
Te abrazo y cierro los ojos...
Afuera todo se calla.

viernes, 2 de marzo de 2007

A las palabras se las lleva el viento...
es lo bueno del chat.
Crees que escribes, pero en realidad solo hablas con los dedos. Todo se queda ahí por un momento y luego desaparece.
Como un lenguaje de señas, efímero, dura poquito.
Se puede guardar, claro, pero nada es más engañoso que eso. Palabras guardadas en archivos guardados, en discos guardados...¿para qué?
Si con tenerlos en la mente basta.
Las palabras se van, no son, no están.
Por eso chatear me gusta.
Y todo esta de por medio.

jueves, 1 de marzo de 2007

Me lo recomendaste, si escribes para ti, crea un blog.
Yo no tomo muchos consejos de extraños, pero por alguna razón fuera de mi espacio, no pareces tan extraño.
Pues aquí esta, el blog. Mi blog.
No es la isla soñada, solo es la tabla que me mantendrá a flote.
MC